Durante el partido de la China Cup en el que China y la República Checa se disputan el tercer y cuarto puesto del torneo, los jugadores He Chao, Wei Shihao y Deng Hanwen lucieron cintas de color carne o muñequeras en los brazos para evitar que se vieran sus tatuajes.

La prensa china señala que la federación de fútbol de sus país "les habría prohibido lucirlos en el terreno de juego". 

La polémica se generó el jueves pasado durante el duelo de semifinales entre China y Gales, que ganaron los europeos por 6 a 0.

El delantero Wei Shihao apareció sobre el campo con un vendaje en su brazo izquierdo para tapar sus tatuajes.

Tienen que jugar con vendas que tapen sus tatuajes para no perderse el Mundial

Al igual que en Occidente, los tatuajes cada vez son más comunes en China, donde un gran número de jóvenes deportistas se han tatuado los brazos, aunque tradicionalmente no estén bien vistos en el país asiático.

Las redes sociales han respondido con ironía a esta nueva medida de censura del Gobierno chino con “memes” en los que aparecen deportistas vendados como momias para poder competir.

En China las autoridades ya vetan la cultura hip-hop y los tatuajes en televisión, por lo que muchos temen que esta prohibición en la selección de fútbol se extienda a otros deportes como el básquet, cuya Superliga con Luis Scola como figura, intenta dar un salto de calidad.