"Es difícil sentirse muy feliz cuando vences a alguien a quien apoyaste desde siempre, y es la persona que más amás en el mundo y tu mejor amiga", dijo Serena Willliams en la cancha central, tras vencer este lunes a su hermana Venus, en los octavos de final de Wimbledon.

"Pero en un momento pensé: tengo 33, ella acaba de cumplir 35, no sé cuántos momentos como estos nos quedan".

Así que se permitió disfrutar del partido, y se quedó con una victoria que puede abrirle la puerta a la número uno hacia un logro especial: completar el Grand Slam en la temporada.

Por ahora, al menos, Serena está entre las mejores ocho en el All England Club, después de conseguir en 68 minutos una nueva victoria sobre su hermana mayor, por 6-4 y 6-3.

Ahora domina el historial entre ambas 15-11, está 8-5 en Gran Slams y 4-2 en Wimbledon, en un duelo fraternal que lleva 17 años.