El entrenador advirtió que "una situación común" en el fútbol argentino es que "los árbitros se sientan presionados cuando uno de los que juega es Boca", por eso instó a sus jugadores a "ser inteligentes" para "no dar posibilidad de compensación" en las expulsiones.

Vélez terminó el partido en Mar del Plata con dos futbolistas menos, Fausto Grillo y Leandro Somoza, quienes vieron la tarjeta roja luego que Boca sufriera la expulsión de Chávez.

"No me gustó para nada terminar con nueve, son situaciones que condicionan al equipo. La expulsión de Grillo la entiendo como un error de juventud, por falta de experiencia", declaró.

Descartada la chance de jugar la Libertadores 2015, Russo explicó que su plantel "ahora debe trabajar en nuevas metas para mantener el ánimo bien alto".

"El partido resultó muy trabado, muy luchado, lo clásico de una final. Boca desequilibró con un gol de otro partido, que llegó cuando Vélez estaba bien desde lo táctico. Nos faltó más precisión y no atacar tanto por el medio", concluyó.