El campeón del mundo en 2002 no es un hombre amigo de las polémicas, aunque le gusta dejar en claro cuáles son sus gustos futbolísticos.

Como aún tiene en mente sus duelos contra Argentina y conoce la rivalidad histórica que existe, reconoció que preferiría que no fuera el equipo albiceleste el que se corone.

Pero finalmente se definió como un “romántico del fútbol”, por lo que indicó que estará contento reconociendo al que sea el campeón del certamen.