En La Academia ya había mostrado parte de sus condiciones, de mediocampista todo terreno, capaz de defender, llevar la pelota y aparecer por sorpresa para definir un encuentro, como lo hizo ante Boca el día de su despedida.

Ya en el fútbol inglés empezó a mostrar sus virtudes, y puso en ventaja al Southampton con un tanto propio de su estilo insistidor, pisando el área y rematando -primero de zurda para definir la faena de derecha- con un disparo bajo que tocó en un palo y se metió en el arco de la visita.