Los problemas con la Hacienda de España finalmente terminaron para Javier Mascherano. El jugador del Barcelona llegó a un arreglo con la Fiscalía de dicho país tras ser acusado de dos delitos.

En total, pagará 816.000 euros (235.000 del primer delito y 581.000 del segundo) y asumirá una pena de 12 meses de cárcel (cuatro procedentes del primer delito y ocho del segundo) que no deberá cumplir. En otras palabras, no irá a prisión.

Mascherano no declaró las rentas obtenidas de la empresa que lo viste (Nike) a través de una sociedad domiciliada en Miami, Estados Unidos, y simuló la cesión de sus derechos de imagen a una entidad puramente instrumental radicada en Madeira, Portugal.

El futbolista argentino reconoció en su declaración haber defraudado al fisco, durante los años 2011 y 2012, esos 1,5 millones de euros, cantidad que devolvió en septiembre pasado junto a otros 200.000 euros de intereses.