Antes de enfrentarse en la décimo octava fecha de la Liga española de fútbol, los jugadores de ambos equipos se fotografiaron sobre el césped del Camp Nou frente a una pancarta que rezaba "Justicia para Topo".

Los dos clubes españoles, que mantenían vínculos afectivos con el periodista, se sumaron así a la campaña emprendida por la esposa de López, la también reportera argentina Verónica Brunatti, después de que su marido falleciera el pasado mes de julio en la ciudad brasileña de Sao Paulo al ser embestido el taxi en el que viajaba por un vehículo robado que huía de la policía.

Brunatti, presente hoy en el Camp Nou junto a los dos hijos de la pareja, reclama que el Estado brasileño reconozca la muerte de su esposo como un homicidio y obligue a los responsables a cumplir sus penas al completo.

En España y en diferentes etapas, López siguió la evolución de los futbolistas argentinos que jugaban en el Barcelona y en el Atlético de Madrid y estableció fuertes lazos con ambas entidades.

Se conocía su amistad con Lionel Messi, el astro del Barcelona, y con Diego Simeone, el técnico argentino del Atlético, comunicador involuntario de la muerte de Jorge López a su esposa a través de Twiter.