Luis Suárez parece estar tocado por una varita. A su salida tumultuosa del Barcelona le siguió la incorporación al Atlético de Madrid, donde el Cholo Simeone sabía que a su estilo de delantero todoterreno le podría sacar mucho jugo.

Y así fue, porque anotó 21 tantos, el último el decisivo para conseguir el título luego de un pase atrás fallido y una corrida interminable que los hinchas colchoneros no olvidarán jamás.

También hay que prestarle atención a Ángel Correa que brilló para que San Lorenzo conquistara su única Copa Libertadores en 2014 y ahora, con un slalom cerrado con un puntazo a lo Romario empató un partido que había conmenzado cuesta arriiba tras el tanto del local que luchaba por mantener la categoría.

El Real Madrid, el temible perseguidor, hizo los deberes al dar vuelta el encuentro ante un Villarreal plagado de suplentes que comenzó ganando el partido.

Pero defendiendo con uñas y dientes el Cholo se llevó el título.