El regreso de Falcioni es motivo de entusiasmo para los hinchas de Banfield. En ese club es idolatrado, y nadie discute lo conseguido bajo su dirección. El respeto ganado lo llevó a sentarse nuevamente en el banco de suplentes tras atravesar momentos complicados con su salud.

Y hasta se permitió un chiste con su estilo de juego para hacer reír a todos los presentes.