El plantel de Racing vivió un momento de zozobra el fin de semana pasado, mientras volvía a Buenos Aires tras jugar con Belgrano en Córdoba.

El club de Avellaneda contrató dos vuelos charters, y en uno de ellos se abrió la puerta cuando la nave estaba a punto de despegar. Los jugadores gritaron para que el piloto detenga la marcha. Tensión.