Lionel Messi está en su mejor momento en el seleccionado argentino. El título conquistado en la Copa América con la final ganada a Brasil en el Maracaná como postre le quitó un peso de encima.

Además el grupo se muestra afianzado, el equipo encontró solidez y los astros se van alineando para que el 10 esté pasando sus días más felices con la camiseta celeste y blanca.

Y eso lo hace más natural y al mismo más querible para la gente. Su gesto de ir a hablar al campo de juego lo muestra como líder pero la vestimenta elegida indica la naturalidad con lo que lo está haciendo.

Tanto es así que manoteó una pechera de fotógrafo y con eso salió a la cancha, lo que hizo matar de risa a Paulo Dybala en cuanto lo detectó.