Al boxeo se le podrá decir de todo, menos que no tiene épica. Grandes escritores -Julio Cortázar, uno de ellos, Norman Mailer, otro- narraron peleas donde el clima que rodeaba al combate tenía tanto peso como la pelea misma.

Saúl, el Canelo, Álvarez, es el boxeador del momento libra por libra. Poseedor de todos los títulos en la categoría supermediano tras su triunfo del sábado ante el británico Billy Joe Saunders.

Por eso su día posterior a la pelea, su ejercicio regenerativo, es un deporte que le apasiona: el golf. Fue a jugar unos hoyos y allí lo recibió el grupo Mariachi Estrella de México de Guadalajara, que le cantaron una canción a viva voz compuesta en su honor en la que se narran los éxitos del campeón, autoría del maestro Ricardo Alfaro.