La barra de Boca llegó a Brasil y tienen entrada para la final
Un centenar de integrantes de "La 12" llegó con entrada en mano a San Pablo, ciudad brasileña en la que Boca enfrentará al Corinthians para definir al campeón de la Copa Libertadores de América.
El grupo de violentos, con Mauro Martín y Maximiliano Mazzaro a la cabeza, partió en el vuelo de la aerolíneas GOL 7657, a las 7 de la mañana desde Aeroparque y cerca de las 9 aterrizó en el aeropuerto internacional de Guarulhos.
De las 200 personas que viajaron en ese avión, 180 eran hinchas de Boca y, de esa cifra, 100 eran barras bravas.
Después de realizar los trámites migratorios el grupo paseó, con el azul y oro "a flor piel", por las calles céntricas de San Pablo.
Las sombrillas y banderas le dieron color y los redoblantes, a la vez, sonido a las calles paulistas.
La particularidad es que los barras bravas viajaron "con entradas y rankeados", según fuentes cercanas a la dirigencia del club.
Y esto generó muchísima polémica, ya que hay entre 3.000 y 4.000 hinchas de Boca sin entradas en las inmediaciones del hotel Hilton, pese a ser (en muchos casos) socios y estar en el ranking de la institución, según averiguó Télam.
Desde la dirigencia les habían sugerido el miércoles pasado a los simpatizantes que no tuvieran localidades no viajasen por la capacidad limitada del estadio Pacaembú. Pero nadie le hizo caso.
Es que Boca recibió de Corinthians nada más que 2.450 entradas y las vendió rápido: 1.533 por el sistema de ranking de socios y el resto en paquetes que incluían el áereo a 7.500 pesos.
El grupo "selecto" de simpatizantes que desembolsaron esa suma de dinero partirá desde el hotel, a las 17.45, acompañados por la policía, que los depositará dentro del estadio.
Así, y por más que insistan cada vez con peor ánimo, los hinchas de menores recursos económicos no conseguirán entradas, al menos por parte de los dirigentes boquenses, a quienes tampoco pueden acercarse demasiado, pues la seguridad del hotel impide que se arrimen a menos de 100 metros del lugar.
De hecho, Daniel Angelici salió y quiso dialogar con ellos, pero tuvo que volver a meterse en el Hilton porque "el clima se puso tenso".
Ante este panorama, con "La 12" y los hinchas "top" con entradas, el resto de los hinchas se reunirán en una plaza emblemática de San Pablo para marchar hacia el estadio.
A lo largo de ese camino habrá diversos cacheos y molinetes antes de llegar a la ya conocida puerta 22, por donde ingresarán al Pacaembú, un escenario que no está a la altura de una final de Copa Libertadores de América y que tampoco será escenario de partido alguno en la Copa del Mundo Brasil 2014.
Los responsables son tres: la Confederación Sudamericana, y las dirigencias de Corinthians y Boca.
Y los perjudicados son los miles y miles de simpatizantes de uno y otro equipo.
Justamente, la expectativa que generó la final de la Libertadores y el tema de la capadidad del estadio motivó a los directivos de Corinthians a disponer un sistema de pantallas gigantes para poder seguir el partido.
El lugar elegido fue el Sambódromo Arena Brahma, a 40 cuadras del estadio, donde instalaron una pantalla gigante para 30 mil personas, con entradas a un valor de 20 reales, algo excepcional que únicamente se hace cuando Brasil juega en un Mundial.