En los festejos que organizó River en el Monumental por los tres años de la final en Madrid, en un momento empezó a sonar el cántico "Gracias, por esa alegría, de ganarle a Boca, de salir campeón"

Y Marcelo Gallardo, sentado en un sillón en la tarima donde lo entrevistaban los conductores de la fiesta -Matías Martin y Alina Moine-, se levantó y comenzó a cantar.

Los jugadores se sumaron, cantaron en círculo y el Monumental explotó. Cuando la calma volvió y los abrazos fueron más fuertes, Gallardo habló: "Esa final nos hizo vibrar de una manera muy especial. Cierren los ojos por 30 segundos. La vida a veces nos pone a prueba. Imagínense el dolor que estaríamos sintiendo en este momento si hubiéramos perdido ese partido. Ahora abran los ojos, miren a su alrededor, vibren y sientan que ganamos la final más hermosa del mundo. Y esa va a ser una realidad por el resto de nuestras vidas".

Y concluyó: "El corazón nos hará latir siempre en esta fecha. Gracias por tanto amor y tanto afecto. Esto va a ser único y eterno".