Maracacinho es un equipo recién ascendido a la primera división de la Liga Deportiva Confluencia de Río Negro que quince días atrás recibió la visita de dos ex combatientes de Malvinas, a poco de una nueva fecha recordatoria del comienza de la guerra. Conmovido por sus palabras el defensor Roberto Muñoz, de 40 años y habitual encargado de patear los penales, se comprometió a celebrar si la tocaba la ocasión con un homenaje a quienes lucharon por el país. 

Por la tercera fecha del torneo llegó el momento esperado. Pateó con decisión y corrió a festejar con la bandera preparada para el homenaje, pero se encontró con la inflexible decisión del árbitro Maximiliano Benito que no dudo en sacarle la segunda tarjeta amarilla por 'festejo desmedido'.