El verano elevó la temperatura de los clásicos del fútbol argentino, y entre tantas patadas y empujones, el clásico veraniego de La Plata finalizó con graves incidentes. Estudiantes vencía 1-0 a Gimnasia, pero ya en tiempo recuperado, los futbolistas terminaron a las piñas.

En el juego, el equipo de Nelson Vivas, de gran nivel en los amistosos de este año, fue un poco más en el primer tiempo en el estadio José María Minella de Mar del Plata, donde se imponía por la mínima, con el tanto de Carlos Auzqui, la figura del ‘Pincha’ en el verano.

La pierna fuerte se pasó de rosca promediando el segundo tiempo, cuando a Álvaro Pereira se le salió la cadena, y le metió una de karate a Facundo Oreja, que quedó inconsciente por algunos minutos. El uruguayo fue así el primer expulsado del encuentro.

Con uno menos, el ‘Pincha’ se quedó un poco, y Gimnasia fue en busca de la igualdad, emparejando el trámite e inclinando la cancha por momentos. El ‘Lobo’ tuvo las suyas, pero chocó siempre con Mariano Andujar, que amuralló su arco y cuidó el cero en su valla.

Cerca del final el que se fue expulsado, erróneamente, fue el arquero Enrique Bologna, por una mano que no fue. Y ya en tiempo recuperado, Santiago Ascacibar vio la roja por una terrible patada desde atrás, y luego se armó la batalla campal.

El verano cerró con una imagen escandalosa, que incluyó una pelea de todos contra todos, con futbolistas matándose a trompadas y hasta pateando a sus colegas en el piso. Silvio Trucco tuvo que suspender el encuentro, y ahora habrá que esperar para saber cómo actuará el Tribunal de Disciplina.