El final de los Romero en San Lorenzo parece cercano. Los paraguayos se compraron todos los problemas con sus compañeros al exigir ventajas en el día a día, y no esforzarse al máximo en una pobre campaña del Cuervo.

Por eso Corinthians -donde ya jugó Ángel- sería el destino de los mellizos que juegan en la selección paraguaya. Los jugadores cobran un millón de dólares por año cada uno lo que haría que los dirigentes no vean con mala cara la salida de los Romero.