Dady D'Andrea, histórico masajista del Seleccionado, desde 1999, reveló qué final le dolió más a los planteles que perdieron el último mundial y las dos Copa América siguiente. 

El hombre admitió, invitado al programa TNT Sports que "el vestuario del 2002 fue terrible", pero reconoció que en una de esas finales perdidas vio a los jugadores más abatidos.