Después de tirar tres veces a Jerry Forrest en el inicio de la pelea pocos apostaban a que el invicto chino Zhilei Zhang iba a dejar pasar la oportunidad de agregar otro triunfo a su récord. Pero el aguante y la perseverancia del estadounidense le permitieron alcanzar un empate que celebró como un triunfo.

El gigante asiático -de casi dos metros- mostró lo mejor de su repertorio en los primeros asaltos pero con el correr de la pelea y al no poder concretar el nocaut se fue cansando y terminó agotado y pidiendo que sonara la campana en el último asalto.