Lukas Bates se disfrazó de Big Ben, nombre con el que se conoce a la gran campana del reloj situado en el lado noroeste del Palacio de Westminster, la sede del Parlamento del Reino Unido, en Londres, para correr un maratón en la capital inglesa y así intentar bajar la marca de corredores con disfraz.

El récord era de tres horas y 34 minutos, y Bates empleó 20 minutos más para el recorrido. Más allá del intento fallido, el joven le sacó una sonrisa a la gente y se fue ovacionado.