"Me tomaré mi tiempo y veré qué hago", respondió Gino, en inglés, a la prensa que lo buscó inmediatamente de la derrota en Oklahoma por 113-99, que eliminó a los Spurs de la temporada de la NBA. 

Emanuel Ginóbili terminó con 5 puntos, 2 asistencias, y un rebote en los 23 minutos que tuvo de juego. Discreta actuación para el argentino, en la que podría ser su última función en la mejor liga de básquet del planeta.

Las palabras de Manu Ginóbili tras el partido tuvieron sabor a balance y despedida, aunque el bahiense, de 38 años, avisó que se tomará un tiempo para decidir su continuidad en laNBA tras 14 temporadas y cuatro títulos conseguidos.

"Estoy acostumbrado a que me pregunten por el retiro. Es algo que sucede cuando pasás los 35 o 36 años. Me tomaré mi tiempo y veré que hago", admitió Manu.

"Ha sido un tiempo increíble en San Antonio. Todos disfrutamos de jugar juntos y hemos hecho cosas increíbles. Ganamos 76 partidos y es lógico estar desilusionado si no logramos ganar este último juego, pero sólo un equipo puede pasar", analizó el bahiense, que tendrá como próximo objetivo su participación en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro con la selección argentina a partir del 5 de agosto.

Su paso por la NBA

"En 14 temporadas en la NBA me ha pasado muchas veces de perder partidos claves. Pero estoy muy orgulloso de haber jugado con estos compañeros por tantos años, ganando tantos partidos. Al igual que haber podido compartir menos tiempo con los nuevos jugadores. Esa es una de las razones por las que uno regresa cada año y quiere ser parte de esto. Hay una química espectacular, pasamos muy buenos tiempos además de compartir con buena gente", resumió Manu.

Y concluyó, sabio: "No se trata sólo de ganar un partido o ganar un título porque también se aprende de las derrotas. Es importante disfrutar el día a día y repito, sólo me genera orgullo haber sido parte de San Antonio durante todo este tiempo. Si me sintiera miserable cada partido y no me pudiera parar dentro de una cancha junto a mis compañeros, retirarme sería una decisión fácil y podría haber pasado hace dos años. Pero además siento aprecio por todo el mundo San Antonio: mis compañeros, el cuerpo técnico y los fanáticos".