En el hotel Intercontinental de la ciudad de Buenos Aires se encuentran concentrado el plantel de Independiente Santa Fe, que este miércoles tendrán una cita con la historia ya que jugarán su primera final en la Copa Sudamericana. De ganar el torneo, sería el primer equipo colombiano en lograrlo.

"Estoy muy orgulloso de estar al frente de este plantel", dijo el técnico Gerardo Pelusso antes de partir a territorio argentino. El uruguayo está feliz por el rendimiento de sus jugadores, luego de ganar con un equipo alternativo su primer partido en la llave contra Júnior de Barranquilla por 2-1, ya que desde la semana pasada anunció que su prioridad es la Copa Sudamericana. "Lo de producir más en ataque y llegar al gol evidentemente es una preocupación permanente, pero esta victoria con el Júnior me deja un poco más tranquilo", analizó el DT.

Independiente Santa Fe Bogotá es un equipo tradicional de Colombia, quien sufrió un fenómeno similar al de Racing: 37 años sin salir campeón, hasta que en 2012 se coronó y desde entonces no paró de tener buenas campañas. El presente es muy bueno, pero llega con una deuda: hace menos de quince días perdió la final de la Copa de Colombia y llega a la definición de la Sudamericana con la obligación de alzar el título. En 1996 perdió la final de la Copa Conmebol ante Lanús.


En tanto, sigue prendido en el campeonato local, en el que el próximo domingo, con varios suplentes nuevamente, definirá su pase a las semifinales ante Junior.

Lo cierto es que en la cabeza de los jugadores de Santa Fe sólo está la denominada "Operación Huracán". El equipo colombiano, como señala la prensa local, tratará llevarse un buen resultado o un punto en Buenos Aires para poder dar la vuelta olímpica en el estadio El Campín el 9 de diciembre próximo. Desde ya no será fácil, ya que el 'Globo' llega entonado y con ímpetu tras haber eliminado a River (último campeón de la Sudamericana y la Libertadores). Huracán también tiene el desafío de conquistar su primer título internacional: fue semifinalista de la Copa Libertadores de 1973, su mayor logró en 107 años de historia.

Consciente del reto que tiene servido sobre la mesa, Gerardo Pelusso asegura que su plantel está mentalizado. "Nosotros somos un equipo, una familia. Somos un grupo muy disciplinado, y todos cumplen una función muy importante. Su tuviera que resumir algo, no sé si se lo tengo que decir con la razón o con el sentimiento. Es un plantel que ha dado tanto por la camiseta", comentó en las últimas horas.

El técnico uruguayo también analizó el duro camino que pasó su equipo para llegar a la final: "Fue difícil. El primer rival fue Liga de Loja, pero después nos tocó Nacional de Montevideo y Emelec, un equipo que tiene siete jugadores de la selección de Ecuador (líder de las eliminatorias sudamericanas). Después nos tocó Independiente de Avellaneda, que es de los que mejor están jugando en el fútbol argentino, y finalmente Sportivo Luqueño (de Paraguay)".

Cabe destacar que Harold Cummings, Francisco Meza y Sergio Otálvaro llegarán recién este martes a Buenos Aires, mientras Juan Daniel Roa no podrá actuar por acumulación de amarillas.

"Nadie del plantel ha estado en una final continental. Es un sueño que teníamos y lo logramos. Yo les decía a los muchachos más jóvenes: 'No se preocupen, yo llevo 46 años peleando para llegar a una final'", les dijo Pelusso a sus futbolistas de cara a la definición de la Sudamericana.

Los puntos altos y bajos de Independiente Santa Fe

La pelota parada es el fuerte del equipo. Los colombianos tienen muy buena estatura, sobre todo en la defensa, y esto se ve potenciado cuando juega Omar Pérez. El enganche argentino, quien está volviendo de una lesión, es el capitán y líder del grupo. Su pegada es exquisita y cada tiro libre puede ser una situación de gol. Por otro lado, otras de sus virtudes son las proyecciones de sus laterales (Balanta, el izquierdo, le marcó un gol al ‘Rojo’).

El equipo de Pelusso también se caracteriza por buenas actuaciones en condición de visitante, donde habitualmente complica a sus rivales porque se defiende muy bien (apenas le marcaron un gol).

En tanto, Wilson Morelo, su delantero más importante, lleva dos meses sin convertir y, lógicamente, esto representa una debilidad. Además, el equipo lleva un desgaste físico muy grande en el semestre, ya que jugó la Copa de Colombia, la liga y la Sudamericana. Eso se ve reflejado en la cantidad de lesionados que tuvo durante la temporada.

Los convocados:

Róbinson Zapata, arquero
Leandro Castellanos, arquero
Sergio Otálvaro, defensor
Harold Cummings, defensor
Almir Soto, defensor
Leyvin Balanta, defensor
Yerry Mina, defensor
Francisco Meza, defensor
Héctor Urrego, defensor
Luis Manuel Seijas, volante
Sebastián Salazar, volante
Baldomero Perlaza, volante
Ómar Pérez, volante
Darío Rodríguez, volante
Yulián Anchico, volante
Yeison Gordillo, volante
Wilson Morelo, delantero
Jaír Arboleda, delantero
Daniel Angulo, delantero
Miguel Borja, delantero