Emiliano Rigoni quizás sea el mejor ejecutante de pelotas paradas del fútbol argentino. Más allá de demostrarlo en encuentros oficiales, como el clásico ante Racing, esta vez lo hizo en un entrenameinto.

El ex Belgrano de Córdoba se destaca por sobre el resto por pegarle de la misma manera tanto con la pierna derecha como con la zurda. De seis tiros, metió cuatro al ángulo, uno pegó en el travesaño y otro se fue al lado del palo.