Diego vistió la camiseta de Newell´s en 1993 y desde entonces, su amor por la Lepra rosarina no dejó de crecer. Entre amigos, el mejor de todos los tiempos alentó con la casaca roja y, como parte del clásico folclore de la rivalidad, se acordó de la academia.

"Los demás tienen que agarrar un megáfono", gritó con sorna en alusión a las cargadas que suelen sufrir los Canallas por alentar con parlantes.