El entorno de Messi, a través de su padre Jorge, recibió una oferta para que el capitán del seleccionado argentino de fútbol se sume al club madrileño, dispuesto entonces a pagar la cláusula de rescisión tasada en 250 millones de euros.

Real Madrid, el rival acérrimo de Barcelona, ofreció un contrato de ocho años con un salario de 23 millones de euros por temporada al goleador histórico del equipo catalán, más uno extra para su padre.

Según el diario alemán, las negociaciones debían llevarse a cabo en un jet privado con Messi y el director deportivo del Madrid, Florentino Pérez, con sus respectivos abogados. Asimismo, se mencionó la intención de presionar al presidente español Mariano Rajoy por el caso de fraude fiscal del rosarino.

Desde Real Madrid desmintieron la información que hubiese ocasionado un revuelo superior al que generó el lusitano Figo cuando pasó de Barcelona a Real Madrid en el año 2000.

Los hinchas 'culé' consideraron al volante luso un "traidor", tras la defensa de la camiseta "azulgrana" durante cinco años, y trasladaron su bronca al futbolista cuando pisó el Camp Nou en el Superclásico del fútbol español.