"Cualquier cosa que comas, un almuerzo de 200 dólares o un hot dog de 2 dólares… los resultados son el mismo: el toilet", bromea y desafía el artista Maurizio Cattelan cuando le preguntan sobre su nueva creación; un inodoro de oro macizo apto para todo público y colocado en el baño del cuarto piso del Museo Guggenheim de Nueva York. 

El artista italiano, que se caracteriza por su arte satírico y político,  pensó este particular inodoro como parte de su colección "América" y como un reflejo dorado del llamado "sueño americano" que es posible de utilizar cada vez que se necesite en un espacio- un museo-  en el que generalmente se le dice al  público de manera constante y amenazadora: "No toque". 

Además de la evidente referencia a la, en su momento, escandalosa  exhibición del mingitorio "La Fuente" firmada por R. Mutt y atribuida a Marcel Duchamp en 1917; Cattelan no niega una posible lectura que relacione la obra con el magnate multimillonario Donald Trump y sus excesos e invita a sentarse en este "trono" y reflexionar. 

Desde el Museo presentan la obra, ubicada en uno de sus baños unisex, como "Es de naturaleza participativa, en la que se invita a los visitantes a usarlo individualmente y en privado. Lo que permite una experiencia íntima sin precedentes con una obra de arte".

La muestra inauguró el último 9 de septiembre y muchos visitantes se animan a hacer uso de la obra, cuyo costo no fue estimado.  "Nuestro personal de limpieza va regularmente cada 15 minutos y usan toallitas especiales, como las de los médicos, que no tienen ninguna fragancia o color u oxidantes", indicó Nathan Otterson, del Museo Guggenheim.