Otro hecho similar al del hotel Bauen se produjo este jueves cuando efectivos policiales llevaron adelante el desalojo de Acoplados del Oeste, la fábrica ex Petinari, que desde hace tres años funciona bajo gestión de los trabajadores porque los dueños dejaron de pagar los sueldos y abandonaron la empresa dejándola a la deriva. 

Los trabajadores habían logrado que se sancionara la ley de expropiación en la legislatura bonaerense en 2015, pero la gobernadora María Eugenia Vidal votó la norma y ahora, los 120 empleados no desconocen si podrán conservar su fuente laboral. 

Los dueños originales de la fábrica del oeste del conurbano, que ahora vuelven a tomar posesión de la misma, está ubicada a la altura del kilómetro 32 de la ruta 200, en el municipio de Merlo. Los mismos "dejaron un tendal de deudas con el fisco y también con sus empleados al momento del cierre. El vaciamiento incluyó salarios, aguinaldos y aportes impagos, por sumas millonarias", detalló esta mañana el sitio Infogremiales en una nota al respecto. 

La planta se dedica a la fabricación de acoplados, carrocerías volcadoras, semirremolques, bateas, contenedores y repuestos en general, y es una de las tres más importantes del país. 

"Se había votado (la expropiación) en Diputados y en el Senado unánimemente, pero a fines del año pasado nos vetan la ley y empezamos a tener problemas con el desalojo judicial. Anoche teníamos el rumor sobre el desalojo, pero no una notificación. Nos preparamos y nos quedamos 30-40 trabajadores toda la noche. A la mañana, nos encontramos con 600 policías. Ahora están apostados en la puerta de la planta y alrededor del predio. Infantería, caballería, caninos, policías locales", relató Jorge Gutiérrez, miembro de la Cooperativa ADO al sitio 24Con.