Mientras las medidas económicas del gobierno nacional generan fuerte rechazo, las gestiones municipales de los intendentes del conurbano mostraron, en general, a vecinos satisfechos con lo realizado en este primer semestre de mandato. 

Según una encuesta de la consultora Poliarquía, un 57 por ciento de los vecinos aprueba la gestión de su intendente, contra sólo un tercio que la desaprueba. La labor no distingue color político ni si se trata de jefes comunales del oficialismo nacional y provincial o de la oposición peronista en sus distintas variantes: kircheristas puros, dialoguistas, renovadores, todos dentro del Frente para la Victoria, y hasta en el proto-oficialismo del Frente Renovador. 

El podio de intendentes con mejor aprobación sobre rechazos, está ocupado por tres intendentes peronistas: Gustavo Menéndez (FPV), de Merlo, con una aprobación del 78% de sus vecinos y el rechazo del 12%, seguido por Luis Andreotti (Frente Renovador), de San Fernando, con 77% de aprobación (17% de bochazos), y Juan Zabaleta (FPV), de Hurlingham, con 73% de aprobación (16% de negativa), indica la encuesta telefónica de 13.953 casos, realizados entre el 22 de julio y el 9 de agosto, en 25 distritos y que reprodujo La Nación este domingo. 

Recién en el cuarto lugar se ubica el primer intendente de Cambiemos, Diego Valenzuela, de Tres de Febrero, con una aprobación de 69 puntos y un rechazo de 22, seguido por Jorge Macri, de Vicente López (69% y 25%).

También en ese escalón de buen rendimiento se encuentran más peronistas: Leonardo Nardini, de Malvinas Argentinas (65% y 23%); Jorge Ferraresi, de Avellaneda (67% y 26%); Martín Insaurralde, de Lomas de Zamora (65% y 26%). Cierran el grupo Gustavo Posse (Cambiemos), de San Isidro (66% y 28%) y Gabriel Katopodis (FPV), de San Martin (64% y 27%).

Con diferenciales de aprobación altos y medios se encuentran Verónica Magario (FPV-La Matanza), con 31 puntos de diferencia entre aprobación y rechazo; Alejandro Granados (FPV-Ezeiza), con 29, Julio Zamora (FR-Tigre), con 27; Patricio Mussi (FPV-Berazategui), con 21; Ramiro Tagliaferro (Cambiemos-Morón), con 19; Martiniano Molina (Cambiemos-Quilmes), con 15; y Mario Ishii (FPV-José C. Paz), con 11; y Nicolás Ducoté (Cambiemos-Pilar), con 9.

El resto de los intendentes, salvo dos, también superaron el nivel de aprobación sobre el de rechazo, o al menos estuvieron parejos. Lo que muestra que en 23 de los 25 distritos, los intendentes logran conectar con sus vecinos, aun a costa de la compleja situación económica que se atraviesa, con una inflación que ya superó el 45% según distintas consultoras y una ola de despidos estimado en 200 mil.

Quienes no superaron el umbral de rechazo fueron Walter Festa, de Moreno, con 54% de rechazo y 32% de aprobación (-22 de diferencial) y Julio Pereyra (FPV), con 69% de desaprobación y 23% de aplazos, para un diferencial negativo de 46 puntos.