No es la primera vez que los gobiernos del mundo muestran su preocupación ante la posible amenaza que puede representar el impacto de un asteroide para la vida en la Tierra. 

Incluso, se han ido desarrollando diversos proyectos que funcionarían como "escudos" ante los bólidos espaciales que pueden alcanzar nuestro planeta. 

Ahora, el paso del asteroide 2012 TC4 - que será a 42 mil kilómetros de la Tierra-, sin implicar riesgo alguno de colisión, les servirá a los especialistas que están trabajando en una red internacional de detección de amenazas provenientes del espacio exterior. 

Se estima que el asteroide es pequeño y que tiene unos 15 a 30 metros de diámetro.  Cruzará justo por encima de la altura orbital de los satélites de comunicaciones y a poco más de una décima parte de la distancia a la Luna.