Las Voyager 1 y 2 de la Agencia Espacial estadounidense (NASA) lanzadas el 20 de agosto y 5 de septiembre de 1977 van camino a convertirse en  los objetos creados por el hombre que más lejos han llegado y que nunca imaginaron que podían durar tanto en el espacio y en contacto con nuestro planeta. 

La primera ya se encuentra en el espacio interestelar y la segunda está a punto de cruzar la frontera del Sistema Solar y pueden llegar a convertirse en el vestigio de la existencia humana que perdure para siempre en las profundidades del cosmos. 

Voyager 1 entró en el espacio interestelar el 25 de agosto de 2012, aunque la NASA confirmó la hazaña un año después. Ahora, la nave estaba a casi 20.900 millones de kilómetros de la Tierra.

Según la NASA, las naves “han revolucionado la astronomía planetaria” ya que nos permitieron conocer detalles maravillosos como la gran mancha roja de Júpiter, la existencia de un océano bajo la superficie de la luna Europa; o los géiseres que escupen hielo en Tritón, satélite de Neptuno.