Desde que fuera reactivada en 2013, la misión espacial Neowise ha descrito 72 objetos nuevos, de los cuales ocho son potencialmente peligrosos para nuestro planeta.

Para establecer la peligrosidad de esos objetos, los científicos de la NASA establecieron una clasificación que se realiza en función del tamaño y cercanía de las rocas espaciales.

Llamados NEOs (sus siglas en inglés), los objetos cercanos son cometas y asteroides empujados por la atracción gravitatoria de los planetas gigantes de nuestro Sistema Solar, en órbitas que les permiten entrar en la vecindad de la Tierra.