El yelmo etrusco tiene 2.400 años de antigüedad, y había sido descubrieron en 1928, en la necrópolis de Osteria di Vulci.

Pero ahora, el Museo Nacional Etrusco de Villa Giulia indicó que 90 años después se descubrió que en su interior hay grabadas una iniciales. 

La inscripción que hallaron en un casco prerromano que puede modificar la historia

En total son siete letras que dicen HARN STE. Probablemente un gentilicio que indica un lugar de origen -del objeto o del dueño- y que debe leerse como una única palabra, explica el museo en un comunicado, indicó la agencia EFE. 

Según los expertos es una inscripción “muy rara” que “ofrece informaciones fundamentales para la reconstrucción de la organización militar y de la evolución del arte de la guerra” en la península itálica antes de la hegemonía de Roma.

Ahora es posible presuponer que el hecho de que la inscripción esté en su interior pueda indicar quien era su propietario, una costumbre de marcar posesiones que es muy actual pero no era habitual en esos tiempos. Esto hace suponer que “reforzaba el sentimiento de pertenencia de un objeto de vital importancia” para el guerrero.

También ofrece información sobre el sistema de fraguas en las que los etruscos fabricaban sus armas y se cree “posible” que el yelmo no fuera elaborado en Vulci, donde se encontró, sino en algún punto próximo a la actual ciudad de Perugia.