Crece la preocupación en Londres la confirmación del hallazgo de una cepa diferente del COVID por lo que se supone sería una mutación genética del virus.

Como los estudios aún son preliminares se supone que las vacunas que ya se están utilizando deberían detener al virus pero es algo que aún no está confirmado.

Científicos británicos dijeron el martes que están tratando de establecer si la rápida propagación en el sur de Inglaterra de una nueva variante del virus que causa el COVID-19 está relacionada con mutaciones clave que han detectado en la cepa.

Las mutaciones incluyen cambios en la importante proteína en forma de "espícula" que el coronavirus SARS-CoV-2 usa para infectar a las células humanas, indicó un grupo de científicos que rastrea la genética del virus, pero no está claro aún si estas lo están haciendo más infeccioso.

"Se están realizando esfuerzos para confirmar si alguna de estas mutaciones está contribuyendo o no a una mayor transmisión", dijeron en un comunicado los investigadores.

Hasta el 13 de diciembre se habían identificado 1.108 casos de COVID-19 con la nueva variante, sobre todo en el sur y este de Inglaterra, precisó Public Health England en un comunicado.

No obstante, en la actualidad no hay pruebas de que la variante tenga más probabilidades de causar infecciones graves por COVID-19, indicaron los científicos, o que haga que las vacunas sean menos efectivas.

"Ambas preguntas requieren la realización de más estudios", dijeron los científicos de COG-UK.