Un gran descubrimiento arqueológico podría ser el desencadenante del conocimiento sobre una nueva dinastía egipcia, que hasta el momento se mantuvo oculta bajo la arena.

Se trata de Senebkay, quien gobernó hace 3700 años, según informó el ministerio de Antigüedades de Egipto. La tumba fue encontrada en la ciudad de Abydos.

El hallazgo fue realizado por un grupo de arqueólogos de la Universidad de Pennsylvania dirigido por el científico Josef Wegner.

Los expertos indican que el hallazgo evidencia que esta parte de Egipto no fue invadida por los hicsos, unas tribus nómadas de Asia y podría indicar el camino a una dinastía faraónica hasta ahora desconocida.

De acuerdo con el Ministerio de Antigüedades de Egipto, tanto en el sarcófago como en las paredes de la tumba se encontró el cartucho real donde fue inscrito el nombre Senebkey. Los arqueólogos también descubrieron el esqueleto del faraón, cuya estatura supuestamente era de unos 185 centímetros.

“La familia real de Abydos que pudo haber descendido de Senebkay era de origen egipcio y no estaba bajo dominio de los hicsos”, dijeron en el Ministerio y señalaron que este hallazgo puede dar lugar a futuros descubrimientos relacionados con la dinastía real.

Wegner dijo a la cadena NBC News: “Hemos encontrado un rey desconocido de una dinastía perdida. Es probable que los 16 reyes estén enterrados aquí. Ahora tenemos la tumba del primer o segundo rey de esta dinastía. Debe haber otros”.

Los arqueólogos dicen que se sorprendieron al descubrir esta tumba ya que estaban excavando y estudiando la tumba de otro faraón. La semana pasada este equipo de arqueólogos logró establecer la identidad de este soberano que se llamaba Sebekhotep I. Se cree este fue el fundador de la dinastía XIII de Egipto hace 3.800 años.