La Agencia de Ciencia, Tecnología y Sociedad de la Universidad Nacional de La Matanza (CTyS-UNLaM) confirmó el hallazgo, por parte de un equipo de paleontólogos argentinos, de los restos de un plesiousaurio -una especie de lagarto gigante- que habitó el suelo antártico hace 150 millones de años. 

Los restos de este reptil que habitó nuestro planeta durante el período Jurásico son los más antiguos encontrados hasta la fecha en esta región. La especie tenía un cuello largo, adaptado para la caza marina, cuatro aletas y podía crecer hasta alcanzar los 12 metros.

"Este registro de plesiosaurio es 80 millones de años más antiguo que lo que se tenía conocimiento para la Antártida", señaló José Patricio O´Gorman, paleontólogo del Museo de la Plata (MLP) y del Conicet, y uno de los coautores de la investigación que se publicará en la revista Comptes Rendus Palevol.

Este animal marino carnívoro con un cuerpo de más de seis metros de largo fue encontrado a 113 Km (unas dos horas de vuelo) de la Base Marambio, la principal estación científica y militar permanente que Argentina mantiene en Antártida.

Campamento en Antártica. Foto: gentileza Instituto Antártico Argentino.
Image caption
Los científicos acamparon cerca del yacimiento durante 40 días en el verano de 2016. Foto: gentileza Instituto Antártico Argentino.
Campamento en Antártica. Foto: gentileza Instituto Antártico Argentino. Image caption Los científicos acamparon cerca del yacimiento durante 40 días en el verano de 2016. Foto: gentileza Instituto Antártico Argentino.

Esta fue la primera campaña realizada en este yacimiento, "que es como un mar congelado de 150 millones de años en un excelente estado de conservación".

"El hallazgo es bastante extraordinario porque el yacimiento no posee el tipo de rocas en las que se puede encontrar materiales preservados en tres dimensiones, como es el caso de las vértebras de este reptil marino", señaló  Soledad Gouiric Cavalli, especialista del MPL y el Conicet. 

Gracias a su estado de conservación, los científicos podrán estudiar las características de la especie así como las del ecosistema en el que se movían.