Un gigantesco reactor de acero instalado en Hefei, al este de China, logró generar una temperatura de 100 millones de grados como parte de un experimento del proyecto Iter en el que buscan controlar la fusión del átomo. Esto significa un logró inédito y un pequeño paso hacia la fusión nuclear, clave en el sector de energías renovables.

La temperatura récord que alcanzó el aparato, llamado “Superconductor tokamak experimental avanzado”, represente seis veces el calor producido en el corazón del sol.

El objetivo del tokamak es generar calor de altísimas temperaturas para poder fundir núcleos atómicos. Esta fusión nuclear es considerada como la energía del mañana  por ser infinita, como la del sol, y no produce deshechos ni gases de efecto invernadero.

“Con esta máquina esperamos aportar la contribución de China al uso de la fusión nuclear por parte de la humanidad”, dijo Song Yunato, uno de los responsables del proyecto del reactor experimental.

Por otro lado, en la localidad francesa de Saint-Paul-lès-Durance se está construyendo otro reactor que será diez veces más grande que sus predecedores, y que podrá alcanzar los 150.000.000 de grados. Los primeros ensayos están previstos para 2025.