Según un informe de la Organización Mundial de la Conservación (WWF, por sus siglas en inglés) difundido este jueves en la Argentina por la Fundación Vida Silvestre, la población de peces, aves, mamíferos, anfibios y reptiles se redujo en el planeta un alarmante 58 por ciento.

Ello ocurrió en los últimos 40 años y, entre los motivos señalados, aparecen la pérdida de hábitat y la degradación de los recursos naturales.

Según el estudio titulado "Planeta Vivo 2016", la biodiversidad de agua dulce fue la más afectada entre 1970 y 2012, con una reducción del 81 por ciento, mientras que en ese mismo período las poblaciones de especies terrestres sufrieron un declive del 38 por ciento y las marinas de un 36 por ciento.

La WWF afirma que la tendencia podría agravarse hacia el 2020, con una potencial reducción de “dos terceras partes de la vida silvestre” si no se llevan a cabo las reformas necesarias en los sistemas de producción de alimentos, energía y finanzas para proteger la vida y los recursos naturales.

Según el alarmante docuemtno, en la Argentina se encuentran amenazadas especies como el yaguareté, el macá tobiano y el delfín franciscana, que sufrieron modificaciones o reducción de su hábitat por deforestación o construcción de represas, además de estar expuestos a la cacería furtiva y la pesca.