Los estudiantes del Colegio Mariano Moreno compartieron un comunicado para explicar que el conflicto desatado el 10 de mayo -cuando en asamblea decidieron levantar el turno tarde para participar de la marcha a la Plaza de Mayo contra el fallo de la Corte por el 2x1- hubo agresiones y resistencia a la manifestación política.

Según los alumnos, el jefe de preceptores agredió físicamente a un adolescente de primer año, con el objetivo de revertir la decisión de participar de la movilización, mientras que después de que definieran su presencia en la plaza, emitieran una sanción al conjunto.

Según informó Tiempo Argentino, los estudiantes tomaron la rectoría con una feroz respuesta de las autoridades: pidieron el ingreso de la policía apra desactivar la protesta y convocaron a una reunión de padres.

Según los adultos allí presentes denunciaron que las autoridades aseguraron que los jóvenes habían incurrido en “actos delictivos” y que la solución al problema pasaría por la “prohibición de militar”, en lo que configura un grave hecho de persecución política cercenando el derecho a la protesta estudiantil.

Tamara Goldzamd, secretaria de género del Centro de Estudiantes explicó al mismo medio que "el jefe de preceptores agredió a un estudiante y las autoridades permitieron el ingreso de la policía. Las autoridades niegan haber prohibido la militancia estudiantil y se comprometieron a firmar un acta en la que reconoce nuestro derecho a hacer política en la escuela. Vamos a exigirles que lo hagan".

"Vamos a llevar la denuncia contra el jefe de preceptores al consejo de convivencia para decidir allí que medida corresponde tomar. Lo mismo con el tema del ingreso de la policía", aseguró Goldzamd.