En una entrevista radial, Jonathan Viale le preguntó a la vicepresidenta por el preocupante nivel de consumo al que llegaron los argentinos, arrojando el certero dato sobre el mercado de la leche: cada argentino toma cuatro litros menos de leche que hace un año.

La vicepresidenta Gabriela Michetti rechazó que la fuerte baja del consumo esté relacionada con una pérdida de calidad de vida y comparó el hecho de que las familias ahora tenga que evitar un producto tan primario para la alimentación como la leche entera -lo clasificó dentro de "bienes superficiales"- con la posibilidad de ahorro para tener una casa propia.

La información que brinda el Ministerio de Agroindustria al respecto, refleja que en 2016 cada argentino tomó cuatro litros menos de leche que un año antes: la ingesta por persona se redujo así a 40,1 litros anuales, es decir, el nivel más bajo desde 2003.

Michetti también comparó el consumo de productos de primera necesidad con la adquisición de indumentaria o electrodomésticos: meter en la misma bolsa peras con manzanas, su especialidad.