Layla apareció hace diez días en el barrio porteño de Flores, luego de haber estado desaparecida desde el 22 de octubre, con una gran cantidad de personas que la buscaban.
Pero todavía al día de hoy, el caso permanece en un misterio que la joven -al parecer- no quiere develar. Lo cierto es que los investigadores no dan con lo que causó su desaparición de varios días.
En primer lugar, la joven se negó a que la revisen ginecológicamente para constatar algún intento de violación o violencia ejercida sobre ella. Pero eso se suma a otros datos que dan más lugar a la duda que a la certeza.
Además, en Cámara Gesell la adolescente arrojó muchas dudas y solo dijo que estuvo acompañada en la calle por gente mayor. Pero nada más.
La pesquisa detalló que se vinculaba con hombres mayores a través de Facebook, y descartaron las primeras hipótesis sobre que la habían secuestrado desde una red de trata.

Layla apareció hace diez días en el barrio porteño de Flores, luego de haber estado desaparecida desde el 22 de octubre, con una gran cantidad de personas que la buscaban.

Pero todavía al día de hoy, el caso permanece en un misterio que la joven -al parecer- no quiere develar. Lo cierto es que los investigadores no dan con lo que causó su desaparición de varios días.

En primer lugar, la joven se negó a que la revisen ginecológicamente para constatar algún intento de violación o violencia ejercida sobre ella. Pero eso se suma a otros datos que dan más lugar a la duda que a la certeza.

Además, en Cámara Gesell la adolescente arrojó muchas dudas y solo dijo que estuvo acompañada en la calle por gente mayor. Pero nada más.

La pesquisa detalló que se vinculaba con hombres mayores a través de Facebook, y descartaron las primeras hipótesis sobre que la habían secuestrado desde una red de trata.