A través del ministro Esteban Bullrich, la Ciudad ofreció a los gremios un incremento del 34,3 por ciento para el maestro de jornada simple sin antigüedad: una parte en marzo y la otra en agosto. Además ofreció un incremento para el resto de las categorías de un 35,5 por ciento, también en dos tramos.

Este viernes, los distintos gremios con afiliados en la capital argentina se reunirán para definir si aceptan o no dicha oferta, lo que condiciona el inicio de clases previsto para el lunes próximo.

Por el momento, el único de los sindicatos que adelantó su negativa fue la Asociación Docente de Enseñanza Media y Superior (Ademys), que el fin de semana decidirá las características de las medidas de fuerza a tomar a partir del 2 de marzo.

"La propuesta está muy lejos de lo que nosotros pedimos que es el 40 por ciento a cobrar en un solo tramo en el mes de marzo", indicó al respecto Carlos Oroz, vocero de ese sindicato.

En tanto, en territorio bonaerense, tanto la FEB como UDOCBA decidieron no aceptar la propuesta del gobierno Scioli argumentando que "achata la pirámide salarial", causando que un maestro que recién comienza ganará "casi lo mismo" que uno con diez años de antigüedad.