"Para la Universidad es importante estar dentro de las 500 mejores. Somos la única universidad argentina y la segunda de Iberoamérica", se defendió  Alberto Barbieri, rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), luego de que se conociera que el Ranking Académico había descendido a la misma entre las 201 y 300 del mundo, un escalón menor que el año pasado.

En el 2016, la UBA se ubicó entre las 151 y 200 del mundo de acuerdo a su "número de egresados y personal universitario que ganó Premios Nobel, número de investigadores altamente citados por la empresa de información Thomson Reuters, número de artículos en revistas de naturaleza y ciencia, el rendimiento per cápita de cada universidad", entre otros.

Pero no solo la UBA descendió sino que también lo hizo la Universidad de San Pablo que pasó de estar en el rango de las 150 mejores, al de las 200; mientras que la Universidad Autónoma de México pasó de estar en el rango de las 200, al rango de las 300. Mientras que la Universidad Aurónoma de Madrid pasó de estar entre las 300 mejores a estar entre las 400.

"Esto es un llamado de atención para todas las universidades iberoamericanas y, principalmente, para la Argentina. El resto del mundo está apostando a la investigación y nosotros tenemos que seguir invirtiendo para poder figurar en este tipo de rankings", aclaró el rector de la UBA a La Nación. Del total de las universidades 57 son de China y 38 son del Reino Unido.