De acuerdo a un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Argentina está entre las naciones con mayores tasas a nivel mundial y se ubica en el tercer lugar en la región. Por esa causa, en nuestro país se producen 14,2 muertes por cada cien mil habitantes.

El informe publicado esta semana, titulado Estadísticas Mundiales de Salud, compila información de 194 estados miembro de la OMS, y reporta que en 2011 -la última estadística consolidada por el Ministerio de Salud de la Nación- esa tasa era de 7,3.

Las estadísticas de la OMS muestran que los números de Argentina están por encima del promedio de la región (9,6) y más cerca de los países europeos que tienen una tasa de 14,1. De hecho, el país se ubica en el tercer puesto en la región, detrás de Bolivia (18,7) y Uruguay (17), pero muy por encima de otros países como Brasil (6,3), Perú (5,8) o Chile (9,9).

Según el director de Salud Mental y Adicciones de la Nación, André Blake, “las cifras son absolutamente preocupantes y son el mal resultado del sistema de atención que tenemos", a lo que añadió que el principal aumento se dio entre los adolescentes varones.

De hecho, las cifras de la cartera de Salud muestran que el sector de la población con mayor tasa de suicidio es el de jóvenes, sobre todo los que tienen entre 15 y 24 años, franja etaria en la que el año pasado se quitaron la vida 844 personas, la mayor parte de ellos (687) hombres.

En relación con los métodos, la mayor cantidad de las muertes (2.348) ocurrieron por ahorcamiento o sofocación, mientras que la segunda causa fueron los disparos (605), según las estadísticas oficiales.

"Es algo que ocurre en todo el mundo y es preocupante. Los factores son multidimensionales, depende si existen o no políticas públicas de prevención, los antecedentes de la persona, el bullying y los abusos colocan al individuo en una situación de mayor vulnerabilidad", explicó Alejandro Ferreira, jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Municipal Rivadavia.