Los argentinos nos jactamos de tener la avenida más ancha y el río más ancho. Esta vez, ambos quedaron en uno, tras la inundación de la avenida principal de Buenos Aires.

El incidente ocurrió a las 3 de la mañana, cuando los operarios que llevan adelante la construcción del Metrobus porteño impulsado por Mauricio Macri, rompieron un caño importante.

Tras cavar una zanja, el agua empezó a subir y se dieron cuenta que se había roto un caño maestro que conduce agua por debajo de la avenida.

El personal de Aysa, junto con cuadrillas del personal de emergencia del Gobierno de la Ciudad cerraron la llave de paso del caño y pusieron bombas para succionar el agua.

Cuando transcurría la mañana de domingo, la laguna que se formó en la 9 de Julio seguía allí por la gran cantidad de agua, mientras se realizaban pericias para saber dónde estuvo el error.

No es el primer accidente que protagoniza el Metrobus porteño -más allá de accidentes de tránsito- sino que a comienzos de marzo, un máquina excavadora había causado la rotura de un caño maestro de gas cuando trabajaba en la dársena central que ocupará el transporte.