"Tengo algunos, pero también tengo razones para odiar a los niños", planteó Corinne Maier una escritora francesa,  madre de dos hijos y que no ve la hora de que el menor de ellos se independice. 

"No es que esté en posición de defender una reducción de la tasa de natalidad. Teniendo dos hijos, no puedo decirle a los demás: ´No hagas lo que yo hice´. No obstante, sí me parece hipócrita esconderme detrás de una pantalla de humo idealista (`No hay nada más hermoso que la sonrisa de un niño´) para justificar mis cuestionables decisiones en la vida", escribió Maier para la BBC

Además planteó las presiones que suele haber sobre los adultos no sólo ante la obligación tener hijos sino también de mostrarse felices. "En mi experiencia, la realidad es muy diferente: criar a un hijo es 1% de felicidad y 99% de preocupación", indicó la escritora. 

Maier y sus dos hijos
Maier y sus dos hijos

Y reflexionó: "Yo estoy perfectamente consciente de cuán involucrada estuve (muy involucrada, de hecho) y como me convertí, lo quisiera o no, en el estereotipo de una madre judía. Eso produce niños hipercontrolados e hipervigilados. Me pregunto cómo ellos se las arreglarán un día para convertirse en adultos". 

Y finaliza: "Niños, bienvenidos y buena suerte a todos mientras se abren camino en este mundo podrido que sus padres, quienes los aman mucho, les han dejado. Pasaron tanto tiempo cuidándolos que no tuvieron tiempo de transformarlo. Se dieron por vencidos, renunciaron, colgaron los guantes. ´El niño es lo más importante`. Nos perdonarán, verdad".