Rebecca, la madre de la pequeña Audrey le dio la chance de elegir como quería celebrar su cumpleaños y la chiquita no dudó: la mayoría eligen productos relacionados a superhéroes, princesas o personajes animados, pero esta niña de Misuri -EEUU- prefirió el famoso emoji de 'caca'.

"A lo largo de varios meses, cada vez que le preguntábamos por la fiesta, Audrey pedía 'globos con forma de caca y una tarta con forma de caca", contó su mamá, al confesar que no pudo convencerla con otros motivos.

Aunque no les parecía apropiado, al buscar y realizar cada elemento la idea les comenzó a parecer divertida. Disfraces, torta, galletas, globos, ropa... todo llevaba el dibujito de materia fecal sonriente impreso. 

Uno de los  juegos fue 'pone la caca en el inodoro', reversionando el clásico 'ponele la cola al burro'. "Creía que los abuelos dirían algo, pero todos se rieron cuando se lo conté", relató Rebecca.