En una muestra más de la complicidad judicial con el Gobierno, la Cámara Federal cerró la causa que acusaba al presidente Mauricio Macri por lavado de dinero, a partir de la investigación internacional conocida como Panama Papers. Sin embargo, el expediente seguirá abierto para determinar si existió evasión impositiva y definir si el mandatario debió declarar su participación en dos empresas off shore, "Fleg Trading" y "Kagemusha".

El cambio de fuero federal porteño al penal económico, es consecuencia de la falta de apelación fiscal ante la resolución del juez Sebastián Casanello en abril pasado -entendió que no había elementos para sostener que desde ambas empresas se había cometido lavado de dinero- según una resolución de la sala II del Tribunal de Apelaciones.

Ahora la investigación, además del fuero económico, seguirá en manos de la Justicia de Instrucción y apuntará a las supuestas inconsistencias en declaraciones juradas del Presidente, según informó políticargentina.com.

La investigación por evasión tributaria quedará adjuntada con la que tramita la jueza Elizabeth Paisan, quien es magistarda subrogante propuesta por el gobierno de Macri para ser titular, pero cuya aprobación está a consideración del Senado. 

A pesar de la desestimación de la Cámara, en su fallo emitió una aclaración: "La hipótesis de trabajo sobre la que se dispuso la intervención del fuero penal económico no es actual sino eventual, en tanto su existencia se reconoce anclada a cuanto pudiera surgir de las actuaciones que se desarrollan en la Administración Federal de Ingresos Públicos", señalaron los camaristas.