Como parte del deterioro de las condiciones laborales de la mayoría de los asalariados, se produjo subrepticiamente el regreso de los tickets para complementar los ingresos de los trabajadores. Pero es no es todo: como si no hubiese pasado nada, la empresa que protagonizó el escándalo de los sobornos denunciados por el diputado Héctor Recalde en 2007 es la que encabeza el retorno.

Según reveló el portal de noticias El Destape, en un artículo publicado por Juan Ignacio Amorín, Accorr Services -la compañía en cuestión, cuyos representantes incluso fueron condenados a tres años de prisión por aquel episodio- se presenta ahora bajo el nombre de Edenred. De todos modos, el logo que aparece en los tickets es prácticamente igual al que miles de empleados conocieron en aquella época.

La nueva modalidad se denomina Restaurant Card, y consiste en una tarjeta que las empresas otorgan a sus empleados para que utilicen hasta 100 pesos diarios dependiendo su puesto. Pueden hacerlo en comercios adheridos de hasta 500 metros a la redonda de su lugar de trabajo, solo en el horario de almuerzo, y un punto interesante es que el saldo sobrante (si no completan los 100 pesos) queda a favor de la tarjeta, que sumando todos esos saldos consigue un plus nada despreciable.

En la web de Edenred pueden leerse diversos argumentos favorables a Restaurant Card: que una buena alimentación disminuye índices de enfermedades, reduce el ausentismo, disminuye accidentes laborales, aumenta la productividad y reduce los costos en el sistema de salud. Nada dice, por supuesto, sobre la virtual desaparición de una parte del salario registrado del empleado, lo cual supone un serio perjuicio tanto para él como para el fisco.

Fuente: Infonews