Leuco trató de justificar su obsesión con Cristina y la atribuyó a "grupos de tareas K"
El periodista considera que la mejor defensa es un buen ataque y utilizó términos habituales para él pero que suenan feo en democracia como "grupo de tareas" y "capucha".
Alfredo Leuco parece no saber distinguir entre una cargada, una crítica y un insulto y mete a todos en la misma bolsa.
Pero además al parecer no es que él tenga una idea fija con Cristina sino que es una edición maliciosa.
Para peor aseguró que con cada opinión pone en juego su relación con los dueños de los medios donde trabaja y su credibilidad. No más palabras, señor juez.