Lejos de desmentir la información que indica que cobró unos 14 millones de pesos no sólo por publicidad sino por servicios que dificilmente ofrezca una productora de televisión, el periodista bromeó con despedir a su gerente comercial porque le parece que cobró poco dinero.

Después se dedicó a denostar a los denunciantes bajo el argumento de que la mejor defensa es un buen ataque.